Una de las cosas que nos preguntábamos cuando nos acercábamos a Rusia era cómo sería el trámite de entrada, pero al final vimos que cruzar la frontera rusa en coche no era tan complicado.
Hay varios pasos fronterizos, nosotras elegimos cruzar por Letonia, en la frontera entre Terehova (Letonia) y Zasitino (Rusia). Esta carretera es la que une Riga con Moscú. Si queréis ver todas las fronteras de Rusia, pinchar aquí
No olvides que has de tener tu visa rusa en regla, y que esta ha de ser de autoturismo. Puedes ver este post para ver cómo conseguir la visa rusa de autoturismo.
El cruce se desarrolla de la siguiente manera
- Se llega a un puesto fronterizo letón. Te preguntan cuánta gente viaja en el coche y te dan un papel blanco en el que escriben el número de personas.
- Sigues avanzando. Todavía en parte letona. Te paran y te piden: pasaportes, carnet de conducir ( el español, no el internacional), el permiso de circulación y la carta verde y te preguntan a dónde vas. Hay que asegurarse de que tu carta verde cubre toda Rusia, con lo que preguntarlo a vuestra compañía de seguros porque sino hay que sacarse un seguro una vez cruzada la frontera rusa.
- Te paran de nuevo. Te piden el papel blanco y se lo quedan, y toca esperar algo de cola.
4.- Mientras estás en la cola, hay otra pequeña cabina a la izquierda, a donde tendrás que llevar los pasaportes y te dan un papel blanco en inglés y ruso para rellenar.
“Parte de adelante”
“Parte trasera”
5.- Ahora tienes que esperar de nuevo. En este puesto es donde transcurre la mayor parte de la espera. Hasta ahora llevamos una hora y media de trámites. A partir de ahora tardaríamos 4 horas y media.
Trámites en la entrada a Rusia
En esa cola todo el mundo se puso en la de Goods to declarate, así que eso hicimos. Vas avanzando muy poco a poco, ellos te van indicando y en esta cola se hacen los siguientes trámites.
- Te llaman en la primera cabina cuando te estás acercando. Ahí te piden el papel blanco que hemos rellenado antes en ruso e inglés y se lo quedan, te miran el pasaporte y la visa, te sellan el pasaporte y te dan la mitad del papel blanco que tendrás que guardar durante tu estancia en Rusia.
- Mientras esperas, en la otra cabina, sabrás cuál es porque hay cola, te dan la hoja de la declaración de bienes, (Customs declaration), que está en ruso completamente y lo tiene que rellenar el dueño del coche por duplicado. Os lo mostramos en la foto.
“Parte de adelante del customs declaration”
“Parte trasera del customs declaration”
Os dejamos el documento con lo que debéis de poner
Revisión del coche
Cuando te hacen avanzar, te revisan el coche. Te hacen abrir maletas, baúl si llevas, y lo que ellos consideren, vaya. Con algunos se esmeran más que con otros, por ejemplo, al señor letón de delante, muy agradable por cierto porque nos iba diciendo los papeles que debíamos ir cogiendo, le llevaron hasta un lugar para revisarle los bajos del coche, se metía la policía literalmente debajo del coche.
Terminada la revisión
Una vez revisado, el policía del fondo, te pide el customs declaration, comprueba que esté relleno, (sabe alguna palabra en inglés) y te da otro que está en inglés para volver a poner tus datos. Te fotocopia el pasaporte, visa, permiso de circulación, y después de un buen rato ahí, te da el visto bueno. Nos dijo: “Ok, you can drive” (vale, ya podéis conducir) y te advierte que el customs declaration es muy importante , que no lo pierdas.
También te dan un papelito verde. Ese papelito es para entregar luego.
6.- Una vez sales hay dos barreras casi juntas. Primera barrera, te miran el customs declaration.
7.- Segunda barrera: te piden el papelito verde ese que te dieron anteriormente.
Todos los trámites nos llevaron la friolera de 6 horas. Otro chico me había dicho que a él en esta frontera le llevó 3 horas, así que imagino que dependerá un poco del día, pero vaya, que la cosa como veis fue lenta.
Pero al final, con paciencia, se consigue 😉
Os dejamos un vídeo en el que podéis ver un resumen de nuestro paso por las carreteras rusas, para que os hagáis una idea de qué os encontraréis cuando crucéis la frontera.
Hay que tener paciencia para aprender a tener paciencia
